Marina López Matres.


Nací en Larache, ya que mis padres habían sido destinados allí desde España. Gracias a ello, pude llenar mis ojos con la intensa y colorista luz que solo allí puede ser apreciada, el tiempo pasa lento y pausado, la vida fue buena en aquel lugar durante mi infancia. Me aficioné a la luz, luz sobre los árboles, entre las hojas, dentro y fuera de mi casa, sobre las aguas; aprendí a jugar con los colores, a rodearme de ellos, a manchar mis manos con el agua y la tierra, con la arcilla.

 

            Desde muy pequeña, adquirí conocimientos en los idiomas de mi entorno perfeccionando mi educación en  diferentes centros, me gustaba conversar y conocer diferentes pueblos y culturas: árabes, marroquíes, franceses, ingleses, españoles; todos tenían algo que ofrecerme, la universidad de la vida.

 

            Tras mi marcha a España, mi patria, ya en mi juventud, los recuerdos y añoranza de aquella tierra, me hicieron volcarme de lleno en la cerámica, en ella trataba de reproducir lo visto, rememorando recuerdos, de nuevo volvíamos a encontrarnos aunque no aún de forma definitiva. Durante un tiempo realice diferentes actividades, fue un periodo de búsqueda intensa. Llevé a cabo diferentes estudios en los que me formé como ceramista: murales, azulejos, educación, obteniendo el título de diseño en artes plásticas y cerámica artística en la Escuela de artes Plásticas y Diseño de San Telmo en Málaga. Me aficioné a la pintura, al fuego, a las formas, a los metales y esmaltes con sus óxidos. Hoy trabajo en mi taller en mi pequeño Larache, enriquecido de amigos / as y de alegría. Expongo y enseño mis piezas en diferentes lugares, van a Francia, Roma, Austria, enseño mi pequeño mundo, muestro mi alegría, mi vida, mi gente y mi presente.

 

            Marina López Martes: 3º Accésit en Nuevas Formas y Diseño en Cerámica en la LXXVI Edición del Concurso de Alfarería y Cerámica de la Rambla (2006).